Los seres humanos, por lo general, no poseemos un sentido del olfato demasiado desarrollado, sin embargo, la mayoría de estímulos que son registrados y almacenados provienen de lo que nuestra nariz es capaz de captar. El marketing olfativo trata de aprovechar la ventaja que la naturaleza le ha otorgado a este sentido para crear estrategias de marketing globales y completas gracias a la inclusión de un odotipo o firma olfativa.
¿Qué es el marketing olfativo? ¿En qué consiste la creación de una firma olfativa? ¿De verdad es tan importante? Aunque hemos escrito mucho sobre el tema, vamos a intentar dar las pautas a seguir para lograr que nuestra marca huela.
El marketing olfativo va más allá de la aromatización de tiendas y otros espacios. Cuando una marca tiene su propia firma olfativa está creando un vínculo permanente con su público, un lazo emocional inconsciente, fuerte y duradero que lo desmarca frente a los consumidores y lo posiciona de manera privilegiada en la mente del cliente. Como hemos dicho, es un vínculo emocional que traspasa la barrera del raciocinio y es por ello que hay que saber elegir cuál será la seña olfativa que defina nuestra marca, porque como ya hemos dicho, la primera impresión es la que cuenta y raras veces contamos con segundas oportunidades para impactar y fijarnos de manera positiva en la mente de nuestro target.
Lograr un odotipo fuerte y eficaz no es una tarea fácil. Es un proceso que requiere concentración, decisión y, sobre todo, emoción. El perfume es algo que debe hacernos sentir y por ello, debemos deshacernos de nuestros prejuicios olfativos y presentarnos «desnudos» ante el proceso de creación de nuestra firma olfativa. Estos son los 10 puntos claves que todo proyecto de marketing olfativo debe cumplir.
- Hay que tener claro qué queremos transmitir y qué queremos lograr. Un odotipo, además de reforzar la estrategia de marketing de las marcas, puede generar pautas de comportamiento e influir en las emociones.
- Identificar nuestro público objetivo. Es fundamental conocer nuestro target y nuestro ámbito de aplicación. Los olores tienen connotaciones según la cultura y país en el que se aplique.
- Una vez que tengamos claro cuál o cuáles son nuestros objetivos, debemos «visualizarlos» en forma de fragancia. Es importante conocer el lenguaje olfativo, las familias y sus asociaciones con determinados sentimientos, estados de ánimo y emociones.
- Cuando el briefing está definido pasamos al trabajo de campo. Los perfumistas seleccionan en base a sus conocimientos sobre las materias primas, sus efectos y asociaciones una serie de muestras que reúnan los valores y atributos que la marca quiere transmitir y/ o destacar.
- Una vez la agencia nos presenta las muestras debemos tomarnos nuestro tiempo; La cata debe ser un proceso tranquilo, con pausas y aislados de cualquier olor que pueda condicionar la percepción de las fragancias que se presentan. Es importante anotar todas las reacciones que cada una de las notas nos provocan.
- Es muy importante tener en cuenta que los perfumes tienen una estructura piramidal e intentar percibir el lugar que ocupan las diferentes materias primas en la composición de ésta.
- Cuando se han seleccionado la/ las notas, es fundamental hacer una prueba y comprobar que el perfume que hemos elegido se comporta tal y como queremos en el ambiente y se integra de manera homogénea en la marca.
- La firma olfativa ha de impactar de manera sutil en el público. No debe avasallarlo o saturarlo pues el efecto que conseguiremos será el de rechazo.
- Cuando el odotipo está concebido para formar parte de la «decoración» de espacios (ya sean oficinas, tiendas, hoteles, etc.) es importante recoger el feedback del cliente y de los empleados. No debemos olvidar que nuestros empleados son parte de la imagen de nuestra marca y su actitud refleja lo que éstos opinan de ella. Es fundamental escuchar a los expertos de las agencias, pues gracias a su experiencia, saben qué perfumes e intensidades funcionan para cada espacio y personal.
- Una vez la firma olfativa se ha consolidado como parte de la marca debemos promocionarlo y crear valor añadido ofreciendo a nuestros clientes la posibilidad de llevarse el perfume a casa en forma de productos basados en nuestro odotipo: velas, mikados, vaporizadores de ambiente, etc.
Dar con el perfume que defina y transmita lo que somos y lo que queremos que el cliente perciba no es fácil y requiere del trabajo de profesionales, tiempo y dedicación. El marketing olfativo ya no es una novedad y toda estrategia de marketing sólida que se precie cuenta con un espacio reservado para él. No esperes más, entra en www.dejavubrands.com y descubre cómo tener tu propia identidad olfativa.